Si lo que buscas es una serie divertida, para pasar un buen rato con tus hijas/hijos adolescentes, mientras aprendas de manera dinámica, Merlí es tu serie. Merlí es una serie catalana de TV3 (traducida a castellano para Netflix), que transcurre en un instituto como eje central que no deja a nadie indiferente y nos enseña mucho de forma divertida.
La serie está protagonizada por un profesor de filosofía que no es nada convencional. Sus clases son muy dinámicas y entretenidas, provocadoras, cosa que encandila al alumnado de manera inmediata. Merlí mantiene una relación familiar y provocadora con el alumnado, consiguiendo hacerles reflexionar sobre sus vidas, su futuro, sus conductas y sus consecuencias.
Pero Merlí no es solo una serie de adolescentes, durante la serie se desarrollan muchas adversidades propias de la etapa adolescente, así como de la etapa adulta, tanto de la vida familiar como del grupo de profesorado del instituto. Por eso podemos afirmar que Merlí es una serie para adolescentes pero también para las personas adultas. Es una serie muy recomendada para que la vean las personas jóvenes, pero que también os va a gustar a los padres y madres.
- El propio Merlí. La serie debe su nombre al protagonista, Merlí Bergeron Calduch (interpretado por Francesc Orella), un profesor de Filosofía de instituto con una manera muy personal de dar clase. Es irreverente, mordaz, manipulador, inteligente, ácido y provocador. El alumnado están encantados con él por su manera de romper las reglas establecidas, por decir lo que piensa sin filtros, y por tratarlos como adultos.
- Trata grandes temas. La serie, lejos de ser simple entretenimiento, trata asuntos importantes como la depresión, la homosexualidad, el suicidio, el consumo de drogas y alcohol, el sexo, la privacidad en redes sociales, la transexualidad, la muerte, la autoestima, el bullying o los embarazos adolescentes. Lo mejor es que no lo hacen de manera frívola ni sensacionalista.
- Despierta ganas de aprender Filosofía. Todos los capítulos se titulan en honor a un filósofo o escuela de pensamiento, sin dejar fuera a mujeres pensadoras. La serie consigue transmitir una idea general del pensamiento de los filósofos más relevantes a través de ejemplos cotidianos, cosa que da valor a la asignatura y estimula el sentido crítico.
- Personajes con dimensión. Los personajes adolescentes tienen personalidad propia y conflictos que van más allá de los amoríos propios de la edad. Huyen de los mitos de la adolescencia y les dan credibilidad. Están en la edad de madurar y esa metamorfosis se refleja en su evolución a lo largo de las temporadas. Y los personajes adultos como los profesores no se quedan atrás en su interesante dimensión.
- Relaciones personales. La serie también es un reflejo de las relaciones familiares entre padres e hijos, y de la diversidad familiar. Hay desde un hijo con mala relación con sus padres, una madre soltera, un matrimonio conservador, hasta el padre que ignora de sus hijos. Y la sala de profesores es un buen reflejo de las relaciones laborales que se pueden encontrar en cualquier trabajo (alianzas, envidias, compañerismo, competición).
- Críticas al sistema educativo. Otras series de instituto han plasmado injusticias o han tocado temas sociales, pero quizá ninguna ha denunciado de manera tan directa y clara el sistema educativo. Un ejemplo es el momento en el que el director del instituto esconde a los alumnos conflictivos para que no molesten durante una inspección. La serie es una crítica constante al sistema educativo y a la falta de estimulación del pensamiento crítico y el razonamiento inductivo.
Principales temas que trata Merlí
- Empatía.
- Aprendizaje sobre filosofía
- Diversidad
- Ansiedad, estrés, depresión y suicidio
- Sexualidad
- Muerte
- Cáncer
- Maternidad adolescente
- Consumo de drogas
- Discusión de temas morales
- Futuro académico
- Política
- Realidad social
- Amor y tipos de relaciones
- Amistad
- Familia
- Educación emocional
- Humor
Por todo eso, os recomiendo que vuestras personas adolescentes vean esta serie, pero, y doy énfasis en ello, os recomiendo verla con ellos y comentarla, no porque sea una serie especialmente sensible, pero sí porque es una de las mejores manera de empezar conversaciones con vuestros hijos o hijas de temas que os cuestan y estrechar así la relación y la comunicación con ellos.
➥Edad recomendada: según Netflix +13, pero yo considero que la pueden ver tranquilamente a partir de 12 años (siempre dependiendo del grado de madurez y no de la edad).
Y a vosotros, ¿qué os parece la serie ‘Merlí’?
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